sábado, 13 de junio de 2009

HAMVAS: LA FILOSOFIA DEL VINO, Iª PARTE




El filósofo húngaro, Béla Hamvas, de una vida triste y miserable como víctima de la dictadura comunista, ha podido sonreír, disfrutar el placer del buen vino, disfrutando la sombra de un nogal en las laderas de los volcanes extintos que custodian silenciosamente las orillas del lago Balaton. Durante su último verano “felíz”, bajo el nogal, contemplando el juego de las luces en el espejo del inmenso lago, inmenso, por lo menos para los húngaros, quienes para esto verano turbulento de 1945, se quedaron no solamente sin mar, sino sin su almirante, quien navegaba la mala suerte de su nación, sin mar, durante 25 años. Este verano fue cuando en una vacación veraniega bajo el nogal, desde la mañana contemplaba, bebía y escribía. Bebía el nectar de las laderas de los volcanes, cubiertos de los viñedos hasta las cimas, y en esto estado dionisíaco, súblime, bebía yescribia. Escribia un libro de filosofìa sobre el placer del vino. “La filosofìa del vino” desde 1945 tenía que esperar hasta 1989, cuando el público especializado, amante de la filosofía y del buen vino, ha podido disfrutar los pensamientos del celebre filósofo sobre los raros momentos festivos de la vida, el relajado juego dionisíaco omnipresente en el mediterraneo, la alegría de la vida iluminada por el vino y de la mujer. Como sucede siempre, las dictaduras primero quieren despojar del subdito estos momentos alegres e iluminados, después, al filósofo lo deponían de su cátedra universitaria, sin jubilación. En el resto de su vida trabajaba como obrero en la industria socialista “floreciente”. Sin embargo, su última obra filosófica concebida en la alegría iluminada “La Filosofía del Vino” sobrevivió su autor y las dictaduras comunistas y sobrevivirá todas las dictaduras futuras porque se trata de los más humanos estratos del ser humano.
Desde 1945, el año del nacimiento de "La Filosofía del Vino", ocurrieron muchas cosas en el mundo del vino. Segùn E. Peynaud, el famoso enólogo bordolés, la enología moderna empezó en los años sesenta. Ya solo por ésto, clasificación de Hamvas no coincide siempre con los lineamientos de la enología. Y no olvidemos que el autor fue principalmente un bebedor profesional, un filósofo, un poeta, resumiendo, un ser humano, demasiado humano.
Una nota personal: Después de terminar mi bachillerato, en el año 1963, mi papá y yo recorrimos Hungría con una moto. Cuando llegamos a una gran obra socialista, un complejo petroquímico (sin una gota de petroleo), me presentaron al contador de un gran depósito. Todos los obreros lo llamaron profesor con gran respeto. El me empezó preguntar sobre mis estudios, sobre la universidad donde iba a estudiar. Examinaba mi formación general sobre los escritores que estaba leyendo, mi música favorita, etc. Y de vez en cuando, se volteaba, y tomaba aguardiente de una botella que se estaba escondida en su bolsillo. Fue Hamvas Béla, exprofesor universitario, exmiembro de la Academia Científica Húngara, "construyendo el socialismo" como escribano de un depósito. Se murió pocos años después, arruinado por el aguardiente. Desde 1990 están buscando sus manuscritos. Desde entonces, editaron 29 volumenes de obras filosóficas, entre ellos "La Filosofía del Vino". Yo tenía la suerte, que sin saber su verdadera importancia, lo he visto y conversaba con el. Quisiera expresar mi gran admiración a su genio, traduciendo y publicando partes de su gran obra.

Salud, Ferenc.

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